Cuando la suma de Directivos Top, no hace un Top Team

Por Fernando Martín, Director en People Excellence

Fernando MartínDe nuevo tenemos que hacer referencia a la metáfora del deporte para confirmar una realidad que cada vez nos encontramos con mayor frecuencia en el entorno empresarial: la suma de jugadores talentosos, no garantizan un equipo ni un juego brillante.

Muy a mi pesar, a día de hoy vemos como mi admirado Real Madrid, no consigue dibujar y menos desempeñar, un juego diferencial que permita soñar a todos sus aficionados con hazañas y metas históricas.

Uno de los principales errores cometido de manera recurrente, es considerar que la primera línea directiva tiene todo aprendido como equipo, que su dilatada experiencia y su histórico de logros -colectivos o individuales-, garantizarán rendimientos futuros y que por tanto, es gratuito tener altas expectativas respecto a su enfoque, coherencia organizativa y funcionamiento como equipo en general. El secretismo que rodea a sus offsite anuales, nos hace pensar que verdaderamente trabajan por el perfeccionamiento del rendimiento colectivo, cuando lo que realmente priorizan es el rendimiento empresarial, que no es poco, pero no es suficiente.

Hay que quemar las naves

Por Fernando Martín, manager de People Excellence

Fernando Martín - GerenteEstos primeros meses del año son momentos cruciales en los que los comités de dirección, áreas regionales o equipos de producto, deben conjurarse y comprometerse de manera auténtica respecto a los retos del año. Desde una posición de privilegio, he podido ayudar recientemente a diferentes equipos naturales a realizar esta trascendental reflexión, acompañada siempre del oportuno y vinculante plan de actuación. Hasta aquí, nada diferente a lo que nos hemos encontrado en años anteriores.
La diferencia que hemos podido contrastar, es que los elementos emocionales y de cohesión respecto a las decisiones tomadas, adquieren un protagonismo genuino, y ayuda a marcar la diferencia entre los planes bien definidos, frente a los bien implantados.
Las siguientes son, a mi juicio, las principales claves que fundamentan un verdadero compromiso respecto al éxito de los planes tácticos: