Sensaciones, la transformación en la atención al cliente

Por Luis Goyanes, director en People Excellence

Luis Goyanes

En tiempo de tormentas, no hacer mudanzas, que decía san Ignacio. Y sin embargo, cada vez encontramos más ejemplos de la idoneidad de estos momentos para implantar modelos que transformen las funciones claves de la organización.

Fijémenos en la atención y orientación a cliente. Probablemente en el top 5 de las competencias y capacidades más trabajadas. ¿Quién no ha dado un curso de atención al cliente?, ¿quién no ha puesto en marcha un programa de captación y fidelización de clientes?, ¿qué organización no ha desarrollado un proyecto de organización sobre la actitud cliente?

Al fin y al cabo, de él vivimos y a él nos debemos con más o menos eficacia. Llegado a este punto de madurez, o por lo menos de reiteración, ¿donde está la transformación?.

Superadas las habilidades, las capacidades, los procesos y hasta las actitudes de cliente, toca abordar lo que realmente importa, lo que realmente decide y define que hará el cliente a partir de ahora. ¿por qué decidirá volver, continuar o sustituirme por otra opción? La respuesta está en las sensaciones que hayamos sido capaces de generarle.

El modelo Sensaciones busca desde el inicio tener claro qué sensaciones quiero generar en mi cliente al finalizar mi interacción con él. A partir de ahí voy a definir en cada una de las etapas de mi proceso de actuación, qué sensación fundamental emana de cada etapa; por ejemplo una buena acogida, lo será no tanto por utilizar los mecanismos verbales establecidos, sino por asegurarme que esta sintiéndose “bien recibido”.

Sensaciones, la transformación en la atención al cliente

Por Luis Goyanes, director en People Excellence

Luis Goyanes

En tiempo de tormentas, no hacer mudanzas, que decía san Ignacio. Y sin embargo, cada vez encontramos más ejemplos de la idoneidad de estos momentos para implantar modelos que transformen las funciones claves de la organización.

Fijémenos en la atención y orientación a cliente. Probablemente en el top 5 de las competencias y capacidades más trabajadas. ¿Quién no ha dado un curso de atención al cliente?, ¿quién no ha puesto en marcha un programa de captación y fidelización de clientes?, ¿qué organización no ha desarrollado un proyecto de organización sobre la actitud cliente?

Al fin y al cabo, de él vivimos y a él nos debemos con más o menos eficacia. Llegado a este punto de madurez, o por lo menos de reiteración, ¿donde está la transformación?.

Superadas las habilidades, las capacidades, los procesos y hasta las actitudes de cliente, toca abordar lo que realmente importa, lo que realmente decide y define que hará el cliente a partir de ahora. ¿por qué decidirá volver, continuar o sustituirme por otra opción? La respuesta está en las sensaciones que hayamos sido capaces de generarle.

El modelo Sensaciones busca desde el inicio tener claro qué sensaciones quiero generar en mi cliente al finalizar mi interacción con él. A partir de ahí voy a definir en cada una de las etapas de mi proceso de actuación, qué sensación fundamental emana de cada etapa; por ejemplo una buena acogida, lo será no tanto por utilizar los mecanismos verbales establecidos, sino por asegurarme que esta sintiéndose “bien recibido”.

La complejidad de tomar una decisión y el Liderazgo que conlleva

Carlos Palacios – Manager de People Excellence

Carlos PalaciosHa sido sin duda un hecho histórico de la era moderna, la abdicación de un Papa, pero más allá de analizar el hecho, reflejo de la humildad del Líder, es importante y extrapolable al mundo empresarial la situación que se crea en la toma de decisión sobre un posible Líder y los estilos de liderazgo que requiere en una situación de cambio.
El primer desafío que plantea esta situación es como elegir un Líder inter pares, situación asimilable a muchos comités y equipos de dirección; algunas son las claves a tener en cuenta en estas situaciones y que deberían convertirse en elementos que conformasen el perfil de cualquier Líder:

  • Capacidad de análisis a corto plazo para ver las consecuencias que tiene la decisión tomada sobre el escenario más conocido, pero también capacidad para entender y explorar escenarios a más largo plazo, con la inteligencia de saber identificar necesidades futuras.

Recursos Humanos, piedra angular en los procesos de transformación empresarial

Santiago de Miguel, CEO de People Excellence

Santiago de MIguelHablar de cambio, sobre todo vinculado con el ámbito de Recursos Humanos, es un tema muy manido. Pero es necesario dar un paso más y establecer la diferencia entre empresas que se adaptan al cambio y empresas que se transforman, fundamentalmente en el escenario actual, en el que parece que con tal sólo adaptarse no se está consiguiendo la competitividad necesaria para encontrar el camino para una recuperación sostenible.

Si hay algo que no podemos negar es que vivimos y seguiremos viviendo en un entorno de cambio y que éste es positivo. La adaptación al cambio no deja de ser una respuesta lógica al entorno, que obviamente es mutante y obliga a reaccionar. Pero es esta propia realidad la que nos lleva a una gran paradoja y es que las estrategias ante el cambio son lógicas pero habitualmente reactivas, ya que la realidad va más rápida que la capacidad de reacción de las organizaciones. Ante esta disyuntiva, el planteamiento que nos hacemos no es el de la adaptación, si no el de la transformación como elemento competitivo, siendo obviamente una exigencia mucho más compleja y que hace que tengamos que modificar el paradigma y hacer otras cosas de manera totalmente diferente.

Por tanto, establecemos que la gestión del cambio es una primera actividad para la transformación.

Definimos la transformación como el proceso mediante el cual algo/alguien se modifica, altera o cambia de forma para responder de manera más eficiente a su entorno.

El amor dura tres años…¿y en una empresa?

Pablo González, Managing Partner de People Excellence

Tras varios años de matrimonio, mucha gente se cuestiona si mantiene el mismo amor que sentía en el momento en que decidió pasar el resto de su vida con otra persona.

Y la gran mayoría de las respuestas pasa por una frase del tipo “le sigo queriendo mucho, pero la pasión ya no es la misma”. Esto implica que el cariño, la dedicación y el sacrificio se mantienen, pero la admiración, la atracción y el deseo han bajado su protagonismo en la pareja. Se confirman las tres etapas secuenciales de las que hablaban Stendhal, Barthes y Cartland hace ya varios años: pasión – ternura – tedio.

Hace poco, confirmé estas reflexiones cuando leí el libro de “El amor dura tres años” de Frédéric Beigbeder. Los mensajes clave eran:

  •  “El amor dura tres años, y nadie nos avisa con anterioridad”,
  •  “Al principio todo es hermoso y soleado”,
  • “Químicamente el amor desaparece, fruto de la bajada de dopamina, noradrenalina, prolactina y oxitocina”,
  • “Levantamos muros para proteger nuestro amor, pero esos mismos muros algún día serán nuestra cárcel”.

 

La extraña costumbre de "abdicar"

Por Carlos Palacios – Manager de People Excellence

Carlos Palacios“La Reina se ha ido, Viva el Rey”…esta frase tronará el 30 de abril cuando se produzca el cambio de Monarca en Holanda, dando lugar a un relevo generacional que forma parte de la cultura y costumbre del país, si bien no parece que sea algo extendido ni al resto de las monarquías, ni al mundo empresarial que nos ocupa en esta reflexión.

“Necesidad de dar paso a una nueva generación, adulta, madura y preparada”, “ser útil por mi conocimiento desde otras posiciones”, “dar respuesta a una sociedad distinta desde un cambio”…son algunas de las razones para la abdicación.
No es una costumbre tan extendida en el mundo de la empresa española. Parece que hay una cierta tendencia a “mantenerse” en el puesto, de hecho si acudimos a los datos nos indican que en nuestro mercado la tendencia es a cambiar 4 veces de compañía y 1 de actividad, mientras que en el mundo anglosajón la tendencia es variar siete vedes de organización y 4 de actividad.

Porqué lo llaman Compromiso, cuando quieren decir Profesionalidad

Por Francesc Galvan, Manager de People Excellence

Francesc Galván - Gerente BarcelonaDurante años, he escuchado comentarios de directores de diferentes empresas y sectores, muy parecidos a los siguientes:

-“Mira cómo está de comprometido que se queda hasta pasadas las 9:00h.”
-“Uy, se ha cogido la reducción de jornada, qué poco compromiso tiene con el equipo.”
-“Manolo está totalmente comprometido porque nunca se queja y acepta todas las decisiones.”
-“No para de quejarse, es el típico tío/tía con poco compromiso.”
-“Mira lo comprometido que está con el proyecto, que se ha pasado todo el fin de semana trabajando.”
-“¿Tienes internet y ordenador en casa verdad? Pues acaba esto el fin de semana y me lo mandas el lunes a primera hora.”
-“Mira, me ha mandado un mail el domingo por la tarde: cómo vive la empresa el amigo/a!!”

Desde un principio, esos comentarios no me gustaban nada, pero como no tenía nada clara la diferencia, me puse a buscar la definición de los dos conceptos para poder hablar con propiedad y así reflexionar con claridad:

Hay que quemar las naves

Por Fernando Martín, manager de People Excellence

Fernando Martín - GerenteEstos primeros meses del año son momentos cruciales en los que los comités de dirección, áreas regionales o equipos de producto, deben conjurarse y comprometerse de manera auténtica respecto a los retos del año. Desde una posición de privilegio, he podido ayudar recientemente a diferentes equipos naturales a realizar esta trascendental reflexión, acompañada siempre del oportuno y vinculante plan de actuación. Hasta aquí, nada diferente a lo que nos hemos encontrado en años anteriores.
La diferencia que hemos podido contrastar, es que los elementos emocionales y de cohesión respecto a las decisiones tomadas, adquieren un protagonismo genuino, y ayuda a marcar la diferencia entre los planes bien definidos, frente a los bien implantados.
Las siguientes son, a mi juicio, las principales claves que fundamentan un verdadero compromiso respecto al éxito de los planes tácticos:

Paradojas del mundo globalizado: la marca como valor diferencial

Por Reyes Minaya, director de People Excellence

Reyes Minaya

La gestión de personas como elemento para una mejor administración de las empresas y organizaciones ante la perspectiva social y económica actual, cobra ahora una importancia crítica y es un factor transformacional decisivo.

Los equipos de dirección de las empresas están tratando de ordenar internamente sus organizaciones mientras intentan aprovechar el reto que ofrece esta situación de transformar la compañía en otra, que compite de manera más eficiente y que se adapta para aprovechar las oportunidades que ofrece la crisis.

Buscan, asimismo, soluciones innovadoras que les permitan un crecimiento sostenido a largo plazo. Muchas de ellas ya lo han hecho, miran hacia los países emergentes, esos que hoy crecen a un ritmo ya impensable en occidente, como una de las principales recetas para atenuar los efectos de la crisis.

En efecto, la globalización es un hecho, y la necesidad de internacionalización de las empresas para asegurar su competitividad en el nuevo contexto económico también lo es. La estrategia de internacionalización permite no sólo el acceso a nuevos mercados y reduce el riesgo gracias a la diversificación, sino que incrementa significativamente su rentabilidad. Latinoamérica, Asia, o África, la elección se sustenta en términos de oportunidad, pero también de estabilidad política, seguridad jurídica, y como no, de vínculo cultural con los países de destino.

Paradojas del mundo globalizado: la marca como valor diferencial

Por Reyes Minaya, director de People Excellence

Reyes Minaya

La gestión de personas como elemento para una mejor administración de las empresas y organizaciones ante la perspectiva social y económica actual, cobra ahora una importancia crítica y es un factor transformacional decisivo.

Los equipos de dirección de las empresas están tratando de ordenar internamente sus organizaciones mientras intentan aprovechar el reto que ofrece esta situación de transformar la compañía en otra, que compite de manera más eficiente y que se adapta para aprovechar las oportunidades que ofrece la crisis.

Buscan, asimismo, soluciones innovadoras que les permitan un crecimiento sostenido a largo plazo. Muchas de ellas ya lo han hecho, miran hacia los países emergentes, esos que hoy crecen a un ritmo ya impensable en occidente, como una de las principales recetas para atenuar los efectos de la crisis.

En efecto, la globalización es un hecho, y la necesidad de internacionalización de las empresas para asegurar su competitividad en el nuevo contexto económico también lo es. La estrategia de internacionalización permite no sólo el acceso a nuevos mercados y reduce el riesgo gracias a la diversificación, sino que incrementa significativamente su rentabilidad. Latinoamérica, Asia, o África, la elección se sustenta en términos de oportunidad, pero también de estabilidad política, seguridad jurídica, y como no, de vínculo cultural con los países de destino.